20 de octubre de 2009

Siempre se entiende


Quien de veras aman a Dios, todo lo bueno aman, todo lo bueno
quieren, todo lo bueno favorecen, todo lo bueno loan, con los
buenos se juntan siempre y los favorecen y defienden. No aman
sino verdades y cosa que sea digna de amar. ¿Pensáis que es
posible quien muy de veras ama a Dios amar vanidades? Ni puede, ni riquezas, ni cosas del mundo, de deleites, ni honras; ni tiene contiendas ni envidias. Todo porque no pretende otra cosa sino contentar al Amado. Andan muriendo porque los ame, y así ponen la vida en entender cómo le agradarán más.
¿Esconderse? -¡Oh, que el amor de Dios, si de veras es amor, es
imposible! Si no, mirad un San Pablo, una Magdalena: en tres días el uno comenzó a entenderse que estaba enfermo de amor; éste fue San Pablo. La Magdalena desde el primer día, ¡y cuán bien entendido! Que esto tiene, que hay más o menos; y así se da a entender como la fuerza que tiene el amor: si es poco, dase a
entender poco; y si es mucho, mucho; mas poco o mucho, como
haya amor de Dios, siempre se entiende.

Teresa de jesus Camino de Perfeccion cap.40

No hay comentarios:

Publicar un comentario